domingo

GANAR, PERDER, QUE?



Estas últimas semanas, he escuchado algunas anécdotas de alumnos que se vieron envueltos en situaciones que podían desencadenar en "problemas", pero que por suerte supieron como resolverlas más allá de lo físico.
Siempre les digo, sostengo y machaco que salvo una situación de verdadero riesgo, eviten el enfrentamiento físico,  incluso a costo de que duden de su “honor”.
Sostengo que es nuestra responsabilidad ser guerreros de la paz, tratar de aportar cordura a situaciones de violencia por la violencia misma,  hacer  un culto del evitar problemas y poner paños fríos cuando lo requiera, porque lo contrario, es apagar incendios con nafta, y esto, es lo último que nuestra sociedad necesita.
En las escuelas de artes marciales, es común encontrarse con alumnos que vienen a aprender defensa personal  y andan por la vida esperando el momento para probarse, por ende, es nuestra obligación como docentes, transmitirles que solo se “desenfunda la espada” en caso de situación límite, que un intercambio de palabrotas no es motivo para hacer o hacerse daño, tampoco lo es un raspón en el auto ni cosa que se le parezca, deben aprender a contextualizar, a tratar de ver las situaciones de forma más calmada que el resto de la población.
Soy un convencido que los artistas marciales debemos ser  una forma de guardianes silenciosos de la cordura  y que debemos tener la sabiduría y templanza  de saber cuando aplicar paños fríos ante situaciones que al común de la gente los desbordaría.  
Es nuestra obligación como docentes hacerles comprender a alumnos que de un enfrentamiento, (salvo absoluta necesidad) no sale NADA bueno, puedo herir o salir herido severamente y en un instante  mi vida puede cambiar para siempre,  “gane” o “pierda”


Abrazos D.Z